Cada temporada surgen ingredientes naturales que se convierten en tendencia dentro de la industria de la belleza. Y, a continuación, surgen una variedad de productos diferentes que los contienen en su formulación e intentan cubrir el mercado. El último (hasta el mes que viene, claro) es la ectoína y, cómo no, el tándem imbatible formado por naturaleza y ciencia está detrás de su «momento estelar» a nivel beauty.
Este compuesto natural de alto rendimiento ha llegado para jugar en las grandes ligas y, atención, rivalizar con el ácido hialurónico, la niacinamida y las ceramidas. Nada menos. Por ello, últimamente no deja de aparecer en la composición de cosmética creada para el profundo cuidado de la piel. Ese cuidado que va más allá de la epidermis y se adentra en el subcutis.
¿Qué es realmente la ectoína?
La ectoína fue descubierta por primera vez en 1985 por Erwin Galinski, un microbiólogo que quería descubrir por qué ciertos organismos prosperan en condiciones extremadamente duras, como los lagos salados egipcios. Pertenece a una clase de moléculas conocidas como «extremólitos», debido a su capacidad para ayudar a las células a sobrevivir en entornos tan severos que son prácticamente inhabitables (el Ártico, los desiertos abrasadores, las profundidades del mar… ya sabes, ese tipo de lugares inóspitos pero fascinantes).
La ectoína se caracteriza por crear capas protectoras y estables de hidratación alrededor de las células vivas, actuando como guardaespaldas contra factores estresantes intensos como la temperatura, la polución contaminante y los alérgenos. Al proteger las células de la piel, ayuda a prevenir respuestas negativas como la inflamación o la pérdida de humedad. Esencialmente, es una especie de autodefensa que ha creado la propia naturaleza para la protección global de la piel.
Y de repente… la ectoína es ubicua
Entonces, ¿por qué este ingrediente multifuncional ha comenzado a formar parte de fórmulas de belleza décadas después de su descubrimiento? Gracias a investigaciones recientes que han demostrado su eficacia para el cuidado de la piel. En una época en la que los y las beauty lovers se han vuelto súper conscientes de la importancia que tiene la barrera de humedad de la piel y, por ello, buscan productos que la fortalezcan.
Y es que, muchas personas han llegado a romper las citadas barreras de humedad usando productos que resultaban demasiado duros para su piel. Frente a ello, la ectoína es un componente anti-estrés que ayuda a curar y calmar la piel, fortalece la barrera cutánea, reduce la pérdida de agua y disminuye la inflamación. Resumiendo, es un ingrediente natural que proporciona muchos beneficios sin crear ningún problema para la piel. Es decir, no tiene efectos secundarios a nivel cutáneo.
Pero… ¿cómo actúa la ectoína?
Al igual que el ácido hialurónico, la ectoína se une al agua y atrae hidratación a la piel. Ofrece beneficios similares a los de la niacinamida al ayudar a calmar la piel y se comporta como una ceramida al fortalecer la barrera cutánea. También promueve una mayor elasticidad y brillo de la piel como la vitamina C. Y si bien existe evidencia preliminar de que la ectoína puede proteger la piel de los rayos ultravioleta, la FDA (Food and Drug Administration) norteamericana no la ha aprobado todavía como ingrediente para protegerse del sol y no debería reemplazar el Factor de Protección Solar o SPF.
Si los beneficios de la ectoína por si sola no son lo suficientemente impresionantes, hay que tener en cuenta también que aumenta la eficacia del ácido hialurónico, las ceramidas y los péptidos para mejorar la humedad y la salud general de la piel. Y convenientemente administrada, sus propiedades antiinflamatorias ayudan a mitigar los efectos secundarios de tratamientos reparadores que sean muy intensos y potentes (aquellos que se suelen pautar durante solo siete días).
Y por último, también para el cabello
Las firmas para el cuidado del cabello también están empezando a subirse al tren de la ectoína. ¿La principal razón? Este ingrediente liviano hidrata el cuero cabelludo sin agregar una capa de aceite al cabello. Y hay propuestas como la colección Scalp Solutions de Áveda que, además, lo utilizan para reforzar la barrera cutánea.
Ya sabemos que la formulación de productos para el cuero cabelludo es siempre un desafío debido a la presencia de cabello. Muchos ingredientes comúnmente utilizados en el cuidado de la piel pueden dejarlo grasoso o apelmazado. Por ello, se buscan ingredientes que sean capaces de fortalecer y reparar la barrera natural de humedad del cuero cabelludo sin causar estos efectos indeseables. Y la ectoína es una estupenda opción. Una vez más, porque ya ha quedado constatada su poderosa capacidad para cuidar de la piel… sin dejar secuelas y reforzando el efecto de otros ingredientes. Qué maja es, ¿verdad?
