El factor emocional es fundamental para tener una piel cuidada, bonita y sana. ¿Qué consecuencias tiene el estrés crónico en la piel? ¿Podemos hacer algo para ayudar a la piel a calmarse? Hablamos con un experto en farmacia para saber más sobre el emosoma y su importancia.
El emosoma y sus consecuencias
Es un término hasta ahora desconocido y nos despierta mucha curiosidad. Para conocer más acerca del emosoma hemos entrevistado al farmacéutico Jerónimo Ors, especialista en salud y belleza de la piel y director de la firma de cosmética botánica Cosméticos Paquita Ors, que explica a VIBE que “emosoma es el efecto de la gestión de las emociones en la piel. ‘Emo’ de emociones y ‘soma’ de cuerpo por su derivación griega”.
El experto expone que hay que tener en cuenta que la piel es sensible y que esta tapizada en cada milímetro de todo tipo de sensores como los de Paccini que detectan la presión mecánica, los de Kreutze responsables del placer, etc, Unos detectan el calor o el frio, otros la presión, la humedad o el tacto suave de una caricia. Sin ellos no podríamos trabajar, acariciar o defendernos. Los sensores envían la información al cerebro por inervación nerviosa, luego los centros de recepción del cerebro procesan y toman decisiones inmediatas sobre qué hacer a través de neuronas efectoras. Esto deriva en abrigarnos si hace frio, apartar las manos si tocamos un objeto cortante, etc.
Sin embargo, hay veces que ese flujo de información se altera y cortocircuita. El cerebro cuando está sometido a estrés y tensión emocional envía órdenes contradictorias. “La piel recibe impulsos erráticos y empiezan los problemas que acaban manifestándose visiblemente sobre la piel”.
Las emociones y su efecto en la piel
Jerónimo Ors nos cuenta que existen numerosos problemas y alteraciones en la piel que tienen que ver con la tensión emocional. “Cuando liberamos cortisol, la hormona del estrés, se liberan también adrenalina y noradrenalina. Estas sustancias suben la tensión, aceleran las pulsaciones del corazón y ponen al cuerpo en modo alarma. Si esta alerta es corta y conseguimos mitigar sus efectos. El daño es mínimo, solo nos estamos oxidando un poco”.
¿Qué ocurre cuando la tensión emocional es sostenida? Ante una situación de estrés laboral, familiar o en época de exámenes se producto un estrés de larga duración que produce una oxidación importante y un cambio en nuestros biorritmos, señala el farmacéutico. “Esto ocurre a nivel sistémico- nuestros órganos y sistemas se ven alterados, entre ellos por supuesto la piel. Bajan las defensas produciéndose pequeñas infecciones desde brotes de acné, caspa o dermatitis, verrugas, etc. El cabello de torna débil y quebradizo. Muchas veces notamos un sobrengrasamiento de piel y cabello”.
La piel, al ser el sistema con más terminaciones nerviosas, es el órgano mas reactivo. Los síntomas que pueden darse por culpa de una tensión emocional sostenida son Incomodidad, irritación, descamación, envejecimiento acelerado y así un largo etc.
Otros factores que pueden afectar a la piel son la falta de sueño, la depresión o ansiedad todos son factores sumamente importantes. Y sus consecuencias más habituales serían el aumento de la sensibilidad, alergias, desarrollo de autoinmunidad, bajada de defensas, envejecimiento acelerado e hiperoxidacion.
Cómo mejorar nuestra piel teniendo en cuenta el emosoma
Es cierto que puede haber momentos puntuales de estrés que son difícilmente controlables pero lo ideal es llevar una rutina saludable que esté al cuidado de nuestra salud y nuestra piel. ¿Qué deberíamos hacer en nuestra rutina de belleza si sufrimos una época de alta tensión emocional? “Sería el momento de abandonar temporalmente las moléculas estimulantes como el retinol y los péptidos regeneradores, todo aquello que estimule la piel. Es más conveniente utilizar plantas calmantes como el regaliz, la mimosa, ángelica o rhodiola, antioxidantes como el ácido ferúlico o las vitaminas C o B3, o bien sustancias que revierten la oxidación como el fullereno”, afirma Ors.
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Crema Intensiva de Noche Origin de Naobay
Tónico facial con vitamina C y niacinamida de Deliplus
Special C Natural Cream de Integra
Dormir, el mejor remedio de belleza
El experto recomienda tener un sueño reparador para poder mantener la salud de la piel y hace hincapié en el necesario equilibrio de los ritmos circadianos para lograr una mejor salud física y mental. “Los profesores Hall, Rosbash y Young recibieron el Nobel por sus estudios al respecto sobre la alteración de los ritmos circadianos que son las oscilaciones naturales que tiene el organismo a lo largo del día, que actúan como un reloj interno desde el despertar con la luz matinal al sosiego necesario para hundirnos en el sueño y que influyen de forma definitiva en la piel porque es extremadamente sensible a estos cambios”.
Ors tiene claro que dormir y calmar la piel son esenciales para lograr una piel más saludable. «Hoy en día sabemos que mientras dormimos las células de defensa, los neutrófilos, salen a patrullar por nuestro cuerpo buscando microrganismos patógenos, de hecho estas células se duplican por la noche, protegiéndonos de las infecciones por esto es tan importante el descanso nocturno, ¡pero sin olvidarnos de nuestras cremas calmantes, por supuesto!”.
Nuestra emociones afectan irremediablemente a nuestra piel, ser consciente de ellas es el primer paso para mejorar su salud y aumentar nuestro bienestar global.
