En 2009 debutó en Un sueño posible (The Blind Side), la película que le valió a Sandra Bullock su primer Oscar, y unos años después protagonizaba Blancanieves (Mirror Mirror) junto a Julia Roberts. Aunque, sin duda, fue en 2020 cuando el nombre de Lily Collins (Guildford, 1989) empezó a estar en boca de todos. Para bien o para mal, el estreno de la serie Emily in Paris se convirtió, sin lugar a dudas, en uno de los grandes éxitos internacionales de la plataforma Netflix. Desde entonces, la hija del músico Phil Collins y de la actriz Jill Tavelman no ha dejado de acaparar titulares y portadas. Y ahora, a solo unos días de que cumpla 36 años, en VIBE hemos querido hacer lo que mejor se nos da: repasar sus mejores looks hasta la fecha. ¿Empezamos?
«They’re just bangs!»», el flequillo (emocional) de su alter ego

Desde su estreno en el otoño de 2020, no hay manera de separar a Lily Collins de su alter ego en la ficción: Emily Cooper. Aunque, desde la primera temporada, la publicista americana no ha abandonado su larga melena castaña, en la tercera entrega se atrevió con un cambio de imagen. ¿Cómo olvidar esa divertida escena en la que se corta el flequillo a pesar de las advertencias de su amiga Mindy? Un (ligero) makeover para dejar atrás el pasado y abrazar el cambio.
Mientras que Sabrina Carpenter ponía de moda el butterfly cut con su flequillo largo y abierto a los lados, en 2022 Cooper apostaba por una versión más parisina. Como os contábamos en otro artículo, el curtain fringe es un flequillo largo y recto que sobrepasa las cejas, una propuesta que se adapta perfectamente tanto al pelo liso, como al ondulado o rizado. Ahora la pregunta realmente nos interesa es: ¿solo nos cortamos el flequillo cuando algo nos sucede emocionalmente? O, como grita exaltada en plena calle a su vecino Gabriel, «They’re just bangs!«» («¡Solo es un flequillo!»).
Pixie, pura tendencia a mediados de los 2000

En 2015 seguramente Lily Collins no era tan famosa como ahora —aunque su etiqueta de nepobaby ya le perseguía desde entonces—, pero ese año su aparición en la afterparty de los Oscar dio mucho que hablar. ¿La razón? Su corte de pelo, un pixie a capas y desenfadado, al que se unieron muchas celebrities por aquel entonces. Scarlett Johansson, Rita Ora o Nicole Richie son solo algunos de los nombres que sucumbieron a este original look. Un estilo que vivió en 2023 su comeback con Úrsula Corberó como embajadora.
Como le pasó a Emily con el flequillo, en ese momento, la actriz tenía 26 años y buscaba un cambio en su vida. Y, sin duda, lo consiguió porque ese corte es uno de los más recordados entre los hair stylists de todo el mundo. Además, su minimelena acrecentó (todavía más) su gran parecido con Audrey Hepburn, una similitud que no dudaron en aprovechar para el rodaje de Emily in Paris en Italia, recreando el estilo de la oscarizada actriz en Vacaciones en Roma.
Larga vida al corte bob

No hay duda de que, fuera de la pantalla, Collins es una gran amante de las melenas cortas. El verano pasado se despedía de la larga cabellera de su personaje ficticio Emily Cooper a golpe de tijera. ¿El resultado? Un bob muy chic, creado por Gregory Russell, su hair stylist de confianza, y muy favorecedor. Sin flequillo, con la raya en medio y justo por debajo del mentón, así es el estilo que la británico-estadounidense luce desde entonces.
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Como ya nos explicaba Kuki Giménez, directora de Let’s Make Up School, este particular carré «tiene el poder de rejuvenecer al instante, destacando los mejores rasgos de quien lo lleva. Ya sea que optes por un acabado más minimalista o por uno con volumen y movimiento». ¿Lo mejor? Su versatilidad, ya que funciona con o sin flequillo, liso u ondulado. Un estilo afrancesado y muy noventero que encaja a la perfección con su nueva campaña de Calvin Klein.
Sin miedo a experimentar
Puede que ser porque el arte lo lleva en la sangre o porque su pasado como modelo le ha aportado una sensibilidad especial por la moda. Sea por la razón que sea, no hay duda de que Lily Collins no tiene miedo a experimentar. Sobre todo cuando hay una alfombra roja de por medio… Así lo hemos presenciado, al menos, en la mayoría de sus apariciones en la Met Gala, el evento más exclusivo del año organizado por Anna Wintour. Y, a pesar de que la primera vez que pisó esa red carpet fue con 19 años y un vestido de Chanel, fue unos años más tarde cuando sus apariciones se hicieron virales.

Uno de los más recordados fue en 2017, con un diseño bicolor de Giambattista Valli que representaba la dualidad de la exposición Art of the In-Between. Un homenaje a los contrastes de Rei Kawakubo en Comme des Garçons y la temática de ese año en el Museo Metropolitano de Nueva York. Aunque fue su beauty look lo que más llamó la atención, una elección arriesgada y ganadora a partes iguales. Una peluca negra con un corte petit bob y baby bangs —que recuerda a la diseñadora de moda japonesa— acompañada de una piel blanca de porcelana, sus ya conocidas cejas y unos labios ciruela casi negros para continuar con ese aire oscuro.

Dos años después, con el camp como dress code de la velada, la actriz volvía a acaparar los flashes de la gran escalinata. Lo hacía con un espectacular vestido blanco y asimétrico, inspirado en el que llevó Priscilla Presley cuando se casó con Elvis en 1967. En este estilismo, el pelo y el maquillaje fueron los protagonistas indiscutibles de la noche. Su diadema acolchada con una voluminosa melena salpicada de flores y un makeup sesentero con unas pestañas infinitas y tupidas, eyeliner felino y una sombra de ojos de color lila intenso. ¿Será esa instantánea la que inspiró a Sofia Coppola a dirigir Priscilla años después?
Del clásico rojo al elegante borgoña

Otro de los sellos indiscutibles de Lily Collins son sus imponentes labios rojos que contrastan visiblemente con su pálida piel. En la pequeña pantalla, la workaholic por excelencia de la agencia Savoir suele apostar por el clásico rouge. El favorito de Aurelie Payen, makeup artist del arrollador éxito de Netflix, es el 999 Rouge Dior Lipstick. Très chic ! Pero, como ya os desvelamos, para pintarse los labios como una auténtica francesa es tan fácil como escoger un color mate, sin brillos, y que no tenga tintes anaranjados o ciruela.

En la vida real, la intérprete cuenta con una paleta cromática más amplia para sus statements lips. Desde el nude —su color fetiche en este último año— hasta colores más oscuros como el cherry o el ciruela. Al menos, así lo demostró el pasado año en la entrega de los premios BAFTA con un elegante diseño de Tamara Ralph Couture, una melena ondulada con volumen y unos labios borgoña perfectamente delineados. Un look muy old Hollywood que combina con su belleza clásica.
Los caballeros las prefieren rubias
El otoño pasado, Collins nos sorprendía con el estreno de Barcelona, una obra de teatro en la que compartía escenario con Álvaro Morte, el eterno «Profesor» de La Casa de Papel. Durante doce semanas, en el Duke of York’s Theatre, este thriller psicológico, lleno de tensión y pasión, narra el encuentro entre un español y una turista americana en la ciudad Condal. Para meterse en el papel de su personaje y, seguramente, para distanciarse de su imagen en Emily in Paris, la exitosa actriz utiliza una peluca rubia platino que consiguió ese golpe de impacto nada más publicar las primeras imágenes.
Consigue su look con 5 productos

Tanto Lily Collins como Emily Cooper son conocidas por su melena castaño caramelo o mocha. Para cuidar uno de los colores tendencia de 2025 hay que escoger una línea de productos nutritivos para potenciar la calidez del tono. La línea capilar Color y Protección de Anian prolonga la intensidad del color y aporta la hidratación profunda que necesitan.

El spray texturizante de Pureology fue el que utilizó el estilista Gregory Russell para peinar su aclamado corte bob y darle movimiento.

La actriz ha mencionado, en varias ocasiones, que utiliza un rodillo masajeador para preparar la piel antes de maquillarse. Si no sabes elegir entre Gua Sha o Roller, te recomendamos este set en cuarzo rosa de MiiN Cosmetics para hacerte un masaje facial y promover el drenaje linfático. Ideal si amaneces con el rostro hinchado.

En cualquier ocasión, Lily Collins siempre presume de piel de porcelana. No busca un efecto glow o dewi skin, simplemente un aspecto hidratado y natural. Por eso, productos como la nueva BB Cream de Deliplus son perfectas para conseguir un makeup no makeup. Cubre ligeramente y protege la piel de los rayos del sol gracias a su FPS 20, además de contener niacinamida, ácido hialurónico y extracto de regaliz para unificar el tono y cuidar la piel.

Nada como el 999 Dior Beauty para unos statements lips en color rojo intenso como los que suele llevar Lilly Collins, tanto fuera como dentro de la pantalla.