Su nombre es garantía de la mejor moda española desde hace décadas. Y ahora también es garantía de diversión gracias al gran éxito del programa Drag Race España, en el que participa como parte de la mesa del jurado. Su diagnóstico de cáncer de mama le llegó en 2020, unos días antes del inicio de la pandemia. Y sus cirugías, la tensa espera de los resultados y la posterior recuperación se produjeron a lo largo de ella.
Ana Locking siempre ha demostrado una gran fortaleza sacando adelante, junto a su pareja, su firma homónima de moda, una propuesta de pequeño tamaño pero gran alcance mediático. Y frente al cáncer de mama… su actitud no iba a ser diferente. La entereza demostrada durante todo el proceso que le llevó hasta la ansiada sanación es todo un ejemplo a seguir. Y también lo es su encomiable activismo al hablar abierta y públicamente de su experiencia con una enfermedad que padecen, a nivel mundial, 1 de cada 8 mujeres.
El testimonio de una gran luchadora
Luchar contra el cáncer de mamá conlleva un desgaste físico, mental y emocional enorme. Pero hay recursos para intentar minimizarlo. VIBE ha podido conversar sobre todo ello con una mujer que, ante todo, impresiona por la energía positiva que transmite y por su infatigable búsqueda de la felicidad a través de la libre creatividad y de la festiva provocación.
Ana, ¿cómo sobrellevó tu piel las cirugías y el tratamiento de radioterapia posterior?
Obviamente mal. Aparte de las dos cicatrices que se producen, la piel de las zonas afectadas sufre muchísimo por la radioterapia y se reseca o incluso se abrasa. En ese momento también la inmovilidad del brazo es un obstáculo que lo complica todo. Sin embargo, tener el permiso médico para poder utilizar los productos de la marca Sativa durante todo el primer año me permitió hidratar la piel y mantenerla en buenas condiciones hasta que me permitieran usar otras opciones.
Tras esa primera fase, ¿qué alternativas fueron las que elegiste y mejor te funcionaron?
Las opciones de belleza orgánica, sin duda. Para el posterior cuidado de la piel tras sufrir cáncer de mamá lo más aconsejable es utilizar propuestas que tengan una composición que sea lo más natural posible. En mi caso, por ejemplo, si los productos cotidianos como el desodorante, el gel de baño o la crema corporal contenían avena conseguía muy buenos resultados. Y hasta el día de hoy continúo usándolos diariamente.
Una vez se consigue una rutina de skincare que sea efectiva en las zonas afectadas, ¿es hora de pensar en cuidarse a través de la cosmética y el maquillaje?
Sin duda alguna. Mejorar por fuera mientras te vas recuperando por dentro es esencial. Y para ello es aconsejable volver a retomar esa rutina de belleza que creías abandonada para siempre. En esos momentos puede parecer que no procede, pero… todo lo contrario. La cosmética y el maquillaje son recursos para cuidarse más y verse mejor. Y eso es justamente lo que necesita una mujer inmersa en la lucha contra el cáncer de mama.
El uso de makeup como terapia mental
Ana, la actitud positivista a través de la belleza que comentas está vinculada con elevar la autoestima personal.
En efecto, es un aspecto vital para la recuperación. Cierto es que, antes y desde el punto de vista médico, todo tiene que ir por buen camino. Ese fue mi caso y por eso lo puedo contar aquí y ahora. Todo parecía abocado a la quimioterapia, pero finalmente no fue necesaria. Ese punto de inflexión en mi proceso de curación fue clave y entonces… encontré en el maquillaje una curiosa vía de escape.
¿En qué sentido el uso de maquillaje te ayudó a nivel anímico durante la curación?
Puede parecer algo estrambótico, pero durante el proceso y teniendo en cuenta las fases de confinamiento que se produjeron por la pandemia… encontré tiempo para sentarme y experimentar con el maquillaje en casa. Y de todo ello sacaba fotos que después compartía con mi entorno más cercano. A través de esas imágenes comprobé mi poder de transformación mientras me divertía y evitaba pensar de un modo negativo sobre todo lo que estaba pasando.
Creo que, teniendo en cuenta lo anterior y tu actual papel en Drag Race España, podría haberse tratado de una auténtica premonición.
Pues sí, porque cuando me entrevistaron para formar parte o no del programa… me llevé esas fotos y les conté su origen. Creo que gracias esa especie de portfolio descubrieron mi personalidad drag y me eligieron finalmente para formar parte de una experiencia que, la verdad, me ha cambiado la vida y me hace muy feliz.
Además te ha ayudado a reinventarte y a superar una durísima etapa marcada por la enfermedad.
Por supuesto. Pero también quiero destacar lo importante que es tener un o una oncóloga que te coja de la mano, te mire a la cara y te diga que lo vas a superar, que te vas a curar. Aparte del apoyo de tu familia propia y de la elegida. Mentalmente no hubiese podido con todo sin esas conexiones diarias para reír, llorar, compartir opiniones o hablar de temas banales. Ahora lo recuerdo y… me emociono, perdona.
Es comprensible al rememorar vivencias tan especiales… no podemos terminar nuestra conversación sin un mensaje en defensa de la prevención.
Es imprescindible… gracias a ella yo estoy viva. Las revisiones periódicas son esenciales en la lucha contra el cáncer de mama. Prevenir, tratarlo a tiempo o, incluso, adelantarse a ello porque en tus genes el índice de probabilidad es muy alto es indispensable para vencerlo. Una vez más, el autocuidado es clave para detectarlo y no se puede descuidar.
