Es más que evidente. El formato stick o en barra está viviendo un gran momento en las estanterías dedicadas al maquillaje, el cuidado de la piel del rostro e, incluso, del cuerpo. Y no es precisamente una novedad. El formato stick existe desde hace años, pero… cierto es que utilizado principalmente en productos relacionados con la higiene corporal como los desodorantes.
Entonces… ¿por qué ha comenzado la (sana) obsesión del ámbito beauty actual por el formato stick? Probablemente por su simplicidad y funcionalidad, incluso también por el punto divertido que tiene su diseño. La consecuencia directa es encontrarlo en categorías de productos que nunca lo habían usado, como sueros, aceites corporales, rubores, protectores solares, bases, etc. Y conteniendo componentes como, por ejemplo, los retinoides. Desde luego, en este sentido el formato stick nunca había dado tanto juego.
Makeup en formato stick para un fast living
Las bases de maquillaje han sido las primeras en apuntarse a este formato tan apetecible. Pura lógica. Una barra con una base ligera y difuminada para el cutis brinda una cobertura media con solo unas pocas pasadas. Este tipo de producto en formato stick ha demostrado ser mucho más versátil que las bases líquidas, y además proporcionan un acabado más natural. Y como no hay dos sin tres, se puede llevar para realizar retoques rápidos durante el día y se puede usar para resaltar y contornear.

El formato en barra se adapta a la ajetreada vida de las beauty lovers sin requerir la delicadeza o las herramientas de aplicación que exige un producto líquido o en crema. Es, sin duda, una opción más dinámica que les permite mostrar su mejor versión desde el momento en que salen de casa hasta el momento en que regresan. Y su éxito es un hecho constatado gracias a firmas como Nudestix que, atención, solo usa este formato para crear su propuesta de makeup minimalista y multi-tasking.
El cuidado de la piel no se queda al margen
Tras el ámbito del maquillaje el universo skincare ha entrado mediante el formato stick en una nueva dimensión. La precisión es el gran beneficio que proporciona administrar tratamientos para la piel con productos en formato barra. Si, por ejemplo, se trata de opciones humectantes como un aceite corporal es esencial que sea capaz de llegar a áreas difíciles de alcanzar, como los codos o los talones, y de ofrecer una aplicación mucho menos complicada que otras cremas y bálsamos que resultan pegajosos.
Al formular productos en formato de barra para el cuidado de la piel, la textura es lo más importante. Y lograr que las fórmulas funcionen requiere mucha creatividad e innovación desde el punto de vista del desarrollo. Por ejemplo, es esencial encontrar el equilibrio perfecto entre una textura firme que mantenga su forma, pero que aún así se derrita y se absorba fácilmente tras la aplicación, sin arrastrar la piel. Ello conlleva encontrar la mezcla, la proporción y la calidad perfectas de ceras y mantecas nutritivas, en concreto de ingredientes como la niacinamida, la manteca de karité y el escualano para garantizar una aplicación suave y no irritante.

Lo cierto es que hay productos para el cuidado de la piel que se prestan especialmente bien al formato en barra. Los humectantes y los protectores solares se encuentran entre los más populares porque pueden formularse con ceras y aceites que se solidifican a temperatura ambiente. Por otra parte, los complejos AHA (como el ácido glicólico, el ácido láctico y el ácido cítrico) o el retinol pueden ser inestables en formato stick debido a la exposición al aire y a la luz. Por esta razón, los activos para el cuidado de la piel más potentes generalmente se presentan en formato líquido o como sueros, sin embargo… ya hay algunas marcas que están intentando solucionarlo.
Ventajas e inconvenientes del formato stick
No hay duda de que la comodidad y la utilidad impulsan el mercado de la belleza en forma de barra semisólida. Su único inconveniente, en comparación con los líquidos y las cremas, es el aspecto higiénico o sanitario. Es muy importante evitar compartir la barra con otras personas o usarla sobre la piel sucia. También se debe evitar usar en la cara un producto en formato stick que haya sido usado en otros lugares del cuerpo, como por ejemplo los pies o los tobillos.

Frente a lo anterior, el formato permite limpiar su superficie para mantener la higiene bajo control. De hecho, siempre es aconsejable raspar suavemente la superficie de la barra con un cuchillo para mantequilla antes del siguiente uso. Y, finalmente, es indudable que el principal beneficio de los productos en formato stick es que prácticamente no requieren educación para usarlos correctamente… y son tan infalibles como parecen.