El verano es la estación perfecta para lucir una piel fresca y natural. Con las altas temperaturas no se buscan grandes artificios, sino mostrar sin complejos esas pecas que han salido tras un día de playa o ese efecto sunkissed, que tanto ansiamos en invierno. Eso sí, con nuestra crema facial con protección solar favorita a mano. Sin embargo, siempre surgen planes y ocasiones especiales en los que queremos «producirnos» un poquito más. ¿El auténtico desafío? Encontrar productos y fórmulas que aguanten el calor (y el sudor). Fluidas, transpirables y sin ese efecto máscara: así son las bases de maquillaje ligeras para sobrevivir en agosto.
Al igual que ocurre con los perfumes, el maquillaje no debería ser el mismo todo el año. Cuando suben las temperaturas y la humedad se dispara, nuestra piel lo nota… y nuestro makeup también. El calor no solo pone a prueba la duración de cualquier producto, sino que también revela cómo reacciona nuestra piel: ¿sudas con facilidad?, ¿tu rostro brilla más de lo habitual?, ¿el maquillaje se desvanece a las pocas horas? Conocer bien tu tipo de piel es el primer paso para elegir una base ligera que se adapte a las exigencias del verano. Las pieles secas, por ejemplo, agradecerán fórmulas con activos humectantes que aporten jugosidad y eviten la tirantez. En cambio, si la tuya es mixta o grasa, lo ideal es apostar por texturas oil free o no comedogénicas para evitar brotes indeseados.
Conocer tu piel es importante, pero también prepararla
¿El siguiente paso? Limpiar la piel correctamente. Como nos contaba Mar Esquinas, maquilladora oficial de la firma española Saigu Cosmetics, en esta época del año «la piel acumula más grasa, sudor e impurezas, y si no la preparamos bien, el maquillaje no se fija correctamente ni se mantiene uniforme». Otro gesto clave es prepaparla con una prebase o primer de calidad, ya que ayuda a mejorar la elasticidad, aporta un aspecto saludable y luminoso al rostro, y además potencia la duración y el acabado del maquillaje que apliques después.
Nourishing Cleansing Oil de Beauté Mediterranea. Con almendras y cúrcuma, este limpiador facial se convierte en un aceite en contacto con la piel y en emulsión fluida en contacto con el agua. Ayuda a eliminar la suciedad liposoluble, el exceso de sebo de los poros y a descomponer el maquillaje dejando la piel hidratada.
Sérum con color: la nueva era de las bases de maquillaje ligeras
Hace tiempo que el sérum con color desbancó a las clásicas BB Creams (Blemish Balm Cream) y CC Creams (Colour Correcting Cream) como opción favorita para unificar el tono sin recargar la piel. También conocido como tinted serum, este híbrido entre tratamiento y maquillaje se ha convertido en el imprescindible de los meses cálidos.¿La razón? Su fórmula ligera combina pigmentos con activos cosméticos como el ácido hialurónico o la vitamina C, que no solo hidratan y aportan luminosidad, sino que también mejoran visiblemente la textura del rostro.
El resultado: una piel jugosa, radiante y con un acabado natural, ideal para quienes apuestan por looks frescos, minimalistas y duraderos en pleno verano. Pero, aunque hayamos dado con la mejor base o sérum, no hay que olvidar que en verano es recomendable aplicar el maquillaje por capas finas y de forma localizada. De esta manera, no saturarás la piel y evitarás esa sensación de pesadez que se acentúa con el calor.
Rosiliance Tinted Moisturizer SPF30 Fresh Rose de Coola (a la venta en en Isolée Shop, Beauty Gallery by ISOLÉE en Galerías Canalejas o en centros El Corte Inglés) es ideal para evitar fundaciones densas. Una hidratante con color y SPF 30 mineral que unifica el tono y protege del sol sin cargar la piel.
Chromosphere de Veralab. El sérum facial con color que refresca la piel. Contiene esferas de pigmento microencapsulado, está compuesto por un 61% de agua y tiene una textura ligera que deja la piel visiblemente más hidratada, rellena, fresca y radiante. Disponible en 12 tonos divididos en las subcategorías medio, cálido o frío, según el subtono y tu tipo de piel.
Face Finishing & Firming Tinted Moisturizer de Perricone MD. Una crema con color que no solo disimula, sino que mejora de verdad la piel, combinando hidratación intensa, un tono unificado y ese efecto glow que parece venir de dentro. Ligera, sin una gota de grasa y con SPF mineral, su textura se funde como si conociera tu piel de toda la vida.
Y si eres de aquellas que no pueden vivir con su base de maquillaje habitual, asegúrate de escoger una opción de larga duración y textura ligera como el Maquillaje Long Lasting de Deliplus. En pleno verano, no hace falta utilizar la base en todo el rostro, sino en aquellas zonas que necesitas cubrir y liberando las áreas más problemáticas y sensibles a la sudoración.
Polvos translúcidos y spray fijadores, el dúo infalible a prueba de sudor
Como último paso, una vez que hayas aplicado tu base de maquillaje, no olvides sellar estratégicamente las zonas más conflictivas con polvos translúcidos: frente, nariz y barbilla. Estas áreas tienden a acumular sudor y brillos, especialmente durante los días más calurosos, y este gesto ayuda a mantener el maquillaje en su sitio por más tiempo. ¿Un truco extra? Finaliza con un spray fijador para asegurar que todo permanezca intacto desde la mañana hasta la noche, incluso bajo el sol más implacable.
Polvos sueltos translúcidos de Deliplus. Los polvos translúcidos son ese recurso infalible al que recurrir en verano, ya sea para aplicar una fina base antes de la base o el corrector, o para controlar brillos en las zonas del rostro donde sudamos más.
Airbrush Flawless Finish Setting Spray de Charlotte Tilbury (a la venta en Sephora). Un spray fijador ligero, hidratante y sin aceites, que sirve tanto para preparar la piel como para fijar el maquillaje. No se deshace, no se difumina y no se seca.
Las bases de maquillaje ligeras son el mejor aliado del verano: unifican, dejan respirar la piel y aportan ese acabado natural que tanto nos gusta cuando suben las temperaturas. Elegir bien el producto —según tu tipo de piel y necesidades— y acompañarlo con una buena preparación y fijación marcará la diferencia. Y tú, ¿ya has encontrado tu base ligera ideal para sobrevivir al calor?
