Cuidar la piel en verano puede suponer todo un reto ya que el sol es uno de los factores que más envejece la piel. ¿Por qué? Porque la exposición a los rayos del sol genera radicales libres, responsables del envejecimiento acelerado de la piel así como signos de la edad como sequedad, arrugas, flacidez, líneas de expresión o manchas. Para evitar la deshidratación de la piel lo ideal es tener un plan de acción post solar después de pasar un día en la piscina o la playa. ¡Manos a la obra!
Sin limpieza no hay belleza
El primer paso y más importante es la limpieza de la piel. Tanto el rostro como el resto del cuerpo al final del día acumulará una serie de impurezas que hay que eliminar de manera eficaz pero sin que la barrera hidrolipídica de la piel se resienta. Restos de crema solar, sudor, exceso de sebo, arena, cloro, salitre… son elementos que hay que retirar con un producto de limpieza suave que acondicione la piel. Una vez la piel esté limpia y libre de residuos ya estará preparada para recibir el tratamiento que apliquemos a continuación potenciándose así sus efectos.
Puedes aprovechar para hacerte una exfoliación con un guante de crin o un cepillo de ducha, o bien utilizar un exfoliante físico para favorecer la eliminación de células muertas y estimular así la renovación celular.
Gel de baño Balance Bath de Beauté Mediterranea
Exfoliante Adzuki & Ragi Fantasy de Byoode
Calma tu piel después del sol
Después de un día de sol la piel necesita calmarse, sobre todo si hay algunas rojeces o irritaciones fruto de la exposición solar. A menudo pueden producirse por la intensidad de la incidencia de los rayos UV aunque hayamos aplicado protector solar o por no replicar el producto cada dos horas, usar una cantidad insuficiente de solar o no reponer el cosmético después de cada baño en la playa o la piscina.
Geles, lociones o cremas a base de aloe vera o calamina serán unas poderosas aliadas para aliviar rojeces, irritaciones y quemaduras leves. Los llamados productos after sun son calmantes, refrescan la piel y aceleran su regeneración, una buenísima opción para apaciguar la piel después del sol y cuidar la piel en verano.
After sun gel lotion The Ritual of Karma de Rituals
La hidratación es la clave
El sol deshidrata la piel muchísimo. Uno de los efectos que conlleva esa falta de humedad es la formación de líneas de expresión, arrugas y descamaciones. Estos signos de la edad son consecuencia de ese proceso acelerado de envejecimiento al que nos referíamos antes. Para evitar estas consecuencias, a todas luces indeseadas, lo ideal es utilizar productos altamente hidratantes, de esta manera contrarrestaremos la pérdida de agua en la piel restaurándola.
Ingredientes como ácido hialurónico, colágeno, manteca de karité, rosa mosqueta, aceite de almendras dulces, glicerina… son muy hidratantes y perfectos para utilizar al volver de la playa nada más salir de la ducha.
Manteca de karité BIO de Marnys
Bálsamo de cuerpo Súper Hidratante de Clarins
Los antioxidantes son para el verano
Son los ingredientes antiedad por excelencia y son perfectos para cuidar la piel en verano. Después de la exposición solar van a ayudar a la piel a repararse y a protegerse de la acción nociva de los radicales libres, causantes del envejecimiento prematuro. Aplicar antioxidantes después de una jornada de sol es ideal para ayudar a la piel a acelerar la regeneración celular, ralentizan el proceso de envejecimiento, ayudan a mantener un óptimo nivel de hidratación en la piel y retrasa la aparición de signos de la edad.
Entre los activos antioxidantes más populares encontramos la vitamina E, la niacinamida, el resveratrol, los flavonoides o la vitamina C. Aplica tu producto cosmético nada más limpiar la piel para favorecer la penetración de los ingredientes al estar la piel aún algo húmeda.
Emulsión de zanahorias de Integra
Crema corporal hidratante Hydrolait de Montibello
Di sí a los cuidados específicos
No hay que dejar de lado el cuidado específico de la piel aunque hayamos pasado un día diferente en la playa o la piscina. Si sigues una rutina de cuidados reafirmante y drenante para aliviar la pesadez de las piernas que se agrava con el calor, o combatir la celulitis, la flacidez y la piel de naranja, aplica tu crema después de la ducha con un masaje enérgico que te ayude a estimular la circulación de la sangre, sobre todo en las piernas, y ayudar al organismo a drenar líquido acumulado.
Hoy en día existen productos reafirmantes que hidratan intensamente y son perfectos para cuidarse mimando la piel con la máxima hidratación y manteniendo su firmeza en un solo gesto.
Leche corporal reafirmante de Redumodel
Crio-gel anticelulítico de Collistar
Si te cuidas por dentro se nota por fuera
Por mucho que cuides tu piel con productos cosméticos adecuados si no llevas unos hábitos saludables no vas a notar una gran mejoría. Llevar una dieta equilibrada que incluya mucha verdura y fruta fresca, beber al menos de 1,5 a 2L de agua al día y tener un buen descanso diario, son tres factores fundamentales para que la piel esté más sana y bonita.
¿No has notado que cuando bebes menos la piel está más áspera y cetrina? Se debe a que no está lo suficientemente hidratada por dentro y eso se nota por fuera. De nada vale estar aplicando hidratantes y productos antioxidantes porque la piel requiere de ese cuidado interno que mantenga el organismo hidratado. Si te cuesta beber agua pásate a las infusiones frías o a las aguas infusionadas, son una forma diferente y deliciosa de beber más agua en tu día a día.
Este verano cuida mucho tu piel después de una larga exposición al sol para evitar que el fotoenvejecimiento prematuro haga su aparición en escena. Mantener la piel hidratada y cuidada, con activos específicos para cada necesidad, es un imprescindible para que esté más sana, joven y visiblemente radiante. ¡Felices vacaciones!