Puede parecer contradictorio… pero no lo es. ¿Un reductor de grasa localizada con efecto frío que resulta eficaz en pleno invierno? Pues sí, existe este tipo de tratamiento. Está constatado que los cambios de temperatura afectan a la barrera protectora de la piel. Y se supone que, en invierno, el frío mejora la circulación sanguínea y, por ello, se quema más grasa. Pero… ¿esto último es un mito o una realidad?
Lo cierto es que, gracias a los efectos de las bajas temperaturas, los músculos se ven obligados a trabajar más para realizar las mismas tareas que completan de forma sencilla en un clima más cálido. En consecuencia y por lógica, si hace frío, se genera un gasto energético extra. Sin embargo, realmente, el ser humano nunca suele pasar frío extremo, ya que posee mecanismos de defensa internos, como tiritar, o se utilizan elementos externos, como la ropa o las calefacciones, para mantener su temperatura constante.
Con el frío, la grasa se elimina antes
Así pues, aunque no está 100% comprobado que en invierno se adelgace más en reposo, los expertos en la materia sí aseguran que, por ejemplo, hacer ejercicio al aire libre en esta estación es útil para quemar más calorías. ¿La principal razón? El frío ayuda a activar la adiponectina, una hormona segregada por los adipocitos que favorece la eliminación de grasa. Empezamos a hilar fino.

Teniendo en cuenta lo anterior, diversos estudios han confirmado que la cosmética específica con efecto frío también es beneficiosa para reducir la grasa localizada. Ello sucede, sobre todo, siendo constante al usar un reductor de grasa localizada durante la noche, ya que durante las fases de sueño profundo se activan una serie de mecanismos implicados en el aumento de la permeabilidad cutánea, la lipólisis y la mejora de la circulación.
¿Crioterapia en invierno? Desde luego
Este tipo de tratamientos de acción criogénica provocan un descenso de la temperatura corporal, por lo que el organismo trata de compensarlo produciendo calor a base de energía que genera al quemar depósitos de grasa localizada. Además, el frío actúa sobre músculos y tejidos, que se tonifican para producir calor y, de este modo, también se consigue oxigenar la circulación sanguínea. Como es evidente, todo ello es como una reacción en cadena que, finalmente, reduce grasa localizada.

Visto lo visto, desde VIBE recomendamos el uso de algún reductor de grasa localizada con efecto frío aunque nos encontremos en pleno invierno. Y, a continuación, te proponemos algunos de los que consideramos más eficaces a la hora de conseguir unos resultados a medio plazo que realmente sean satisfactorios y evidentes desde un punto de vista fisiológico.

El gel con efecto fresco y reductor 7 Noches de Somatoline Cosmetic es un tratamiento ultra intensivo. Utiliza la crioterapia para una eficaz acción reductora y drenante mientras se duerme. Su fórmula salina osmótica contiene sales marinas ricas en oligoelementos, sericosido natural y extracto de algas. Actúa sobre la grasa localizada y el exceso de líquidos reduciendo y mejorando la firmeza de la piel.

La emulsión reductora y reafirmante con efecto frío de Redumodel está enriquecida con algas, colágeno, cafeína y elastina. Su textura es fluida y no grasa, por lo que penetra de inmediato en la piel. Su uso continuado reduce visiblemente el volumen de las zonas tratadas, facilitando la disolución de los nódulos de grasa y de la celulitis. Al mismo tiempo, reafirma la piel manteniéndola tonificada y elástica.

El gel anticelulítico con efecto frío de Deliplus (a la venta en Mercadona) favorece la eliminación de toxinas de la piel y acúmulos de grasas. Y a la vez refresca y reafirma. Se aplica una vez al día en las zonas con celulitis mediante un masaje circular hasta su total absorción. Inmediatamente se nota una sensación de frío que nunca es perjudicial ni duradera. ¡Es la demostración de la eficacia del gel!

La crema anticelulitica reductora PostQuam de Criogel tiene efecto frío y se puede masajear en zonas de todo el cuerpo como brazos, abdomen, caderas, glúteos o muslos. En su formulación cuenta con activos anticelulíticos como la hiedra, el fucus, la centella asiática y el guaraná y otros reafirmantes como el extracto de uva, el té verde y el ginkgo biloba. Tras aplicarla mejora la elasticidad y la firmeza de los tejidos.

La crema drenante Be Fresh de Lua Body es un producto con efecto frío para combatir la celulitis y reactivar la microcirculación que está indicado para aquellas personas que sufren de piernas cansadas o tienden a retener líquidos. Su fórmula, con zumo de aloe orgánico y otros principios activos naturales, penetra de manera profunda, mejorando el aspecto de la piel de naranja y consiguiendo una piel más tersa y tonificada.

El gel quemagrasa con efecto frío de Mi Rebotica es idóneo para tratar la grasa localizada y la celulitis blanda edematosa en muslos, glúteos y cartucheras. En su composición destacan los siguientes ingredientes naturales: fucus, guaraná, ruscus, hiedra, mentol, alcanfor y carnitina. También es una alternativa recomendada para personas con problemas circulatorios, tiroides y alergias a salicilatos.