Hay maquillajes que parecen creados para levantar el ánimo. Y el toasty makeup es uno de ellos. Si has visto últimamente en Instagram o TikTok rostros con mejillas sonrojadas, toques dorados y pequeñas pecas estratégicamente maquilladas, ya sabes de lo que hablamos. Es el maquillaje del momento, cálido, natural y con ese efecto de piel besada por el sol, quizá te suene más por sun-kissed, que todas queremos mantener incluso cuando el verano ha quedado atrás.
«Es la oda a una piel besada por el sol, con un rubor cálido y salpicado de pecas que evocan frescura y naturalidad. El resultado aporta un efecto juvenil, espontáneo y muy real. Es ese punto de verano eterno que todas queremos replicar en el resto de las estaciones como el otoño o el invierno. En redes triunfa porque es fotogénico, aspiracional y al mismo tiempo alcanzable», explica Raquel Linde, experta en belleza y responsable de marketing de You Are The Princess.
¿Qué es el toasty makeup?
Su nombre lo dice todo: toasty por ese tono ligeramente tostado, y freckly por las falsas pecas que lo acompañan. Es una evolución del sun kissed makeup, pero con un acabado más suave, romántico y realista. No busca la perfección, sino capturar esa sensación de piel viva, saludable y ligeramente sonrojada tras pasar un día al aire libre.
Lo mejor es que este estilo no entiende de estaciones ni edades. Favorece a todas, se adapta a cualquier tono de piel y, además, rejuvenece al instante. La clave está en la naturalidad: menos contorno marcado y más rubor que abrace el rostro entero, aportando calidez y vida a la expresión.
A diferencia del colorete clásico que solo se aplica en los pómulos, el toasty makeup busca envolver el rostro con un halo de color. «El toasty freckly blush va más allá de dar color. El rubor tradicional se limita a marcar pómulos, este estilo en cambio envuelve el rostro con calidez y añade un guiño juguetón con las pecas. El resultado es más tridimensional, menos rígido y mucho más cercano a un look effortless chic», comenta Linde. Esa es precisamente la razón de su éxito: no parece maquillaje, sino una piel realmente saludable.
Cómo recrearlo paso a paso (sin ser profesional)
Aunque parezca obra de un maquillador experto, en realidad es fácil de lograr. Solo necesitas unos pocos productos y el toque justo de difuminado. «La clave está en aplicar el rubor en mejillas, puente de la nariz y sienes, difuminando bien para lograr ese efecto de ‘golpe de sol’. Elige tonos cálidos y juega con la intensidad según tu piel. Para las pecas, basta un lápiz marrón claro, aplicando pequeños toques y difuminándolos suavemente con el dedo. El secreto es no buscar la perfección, sino la naturalidad desenfadada», aconseja la experta.
Otro truco es mezclar el colorete en crema con un poco de iluminador líquido para conseguir ese acabado luminoso que imita el brillo del sol. Y si quieres un resultado más realista, aplica una bruma facial al final para fundir los productos con la piel.
A quién favorece (y cuándo llevarlo)
«Es perfecto para mujeres que buscan un look fresco, juvenil y sin esfuerzo. Favorece a quienes quieren suavizar rasgos y proyectar cercanía, porque aporta calidez inmediata al rostro. También es la técnica estrella para eventos diurnos o escapadas veraniegas», señala la experta. Además, se ha convertido en el aliado favorito de quienes quieren un glow natural para el día a día, sin recurrir a bases pesadas ni excesos de polvo. En el fondo, es el maquillaje que mejor representa la nueva era de la belleza: espontánea, auténtica y con textura de piel real.
Y sí, confirmamos, su éxito tiene sentido. Este look reúne todo lo que buscamos ahora mismo: naturalidad, optimismo y ese toque de no makeup makeup que encaja con cualquier estilo. Además, es 100% Instagram friendly: la luz lo potencia, las pecas aportan un punto más dulce y los tonos cálidos funcionan con todos los filtros. Pero más allá de las tendencias, el toasty makeup celebra algo que va mucho más allá del maquillaje, la idea de que la belleza no está en tapar ni en cubrir imperfecciones, sino en resaltar lo que ya tenemos.
Los mejores productos para recrear el ‘toasty makeup’

Nude Combo de Mercadona. Este nuevo cofre reúne cuatro básicos —colorete fluido mate, perfilador, barra de labios y brocha— en tonos nude que realzan la piel con un rubor cálido y natural. Su textura ligera facilita el difuminado para conseguir ese efecto de «besada por el sol» tan propio del toasty makeup. Además, su formato cilíndrico y compacto lo hace perfecto para llevar siempre contigo. Un acierto seguro para conseguir buena cara en segundos.


Party lab Freckle Me Up Bolígrafo & The Game Changer Ombré Blush de You Are The Princess. El dúo perfecto para conseguir un toasty makeup auténtico. El primero añade esas pecas sutiles y naturales que aportan frescura al rostro, mientras que el colorete mezcla tonos cálidos con un acabado degradado que recrea el clásico rubor de “golpe de sol”. Ambos se funden fácilmente con la piel, dejando un efecto luminoso, juvenil y real, como si acabases de volver de un día al aire libre.

Mini Terra Terracota de Benefit Cosmetics. Con su tono teja-dorado y acabado luminoso, este colorete aporta ese rubor cálido y natural típico del toasty makeup. Su textura fina se funde fácilmente con la piel, dejando un efecto radiante y saludable. Ideal para dar vida al rostro en un solo gesto.


