Paquita Ors hubiera cumplido 97 años este mes de febrero. La valenciana, nacida en 1928 y fundadora de la compañía Cosméticos Paquita Ors, fue pionera en el sector cosmético al introducir rigor científico y productos de altísima calidad al alcance de todos.
Paquita nos ha dejado, pero su legado de innovación, pasión y compromiso con el cuidado de la piel (y con las personas) continúa, más vivo que nunca, de la mano de su familia. Estuvo en activo hasta los 89 años y su hijo, Jerónimo Ors, que continúa desde los años 80 con las mismas ganas y la filosofía de su madre en la empresa familiar, sigue siendo un referente en la cosmética botánica de nuestro país.
VIBE ha tenido la oportunidad de hablar con Jerónimo Ors sobre la fascinante vida de Paquita Ors, su labor social y de su pasión por la cosmética, un amor que convirtió en el trabajo de toda una vida:
Paquita Ors, una pionera en el sector cosmético
¿Podrías compartir cómo fueron los primeros años de tu madre y qué influencias la llevaron a interesarse por la farmacia y la cosmetología?
Mi madre estudió la carrera de Farmacia en Granada, por influencia de mi abuela. Una mujer que, aunque conservadora en lo político, era profundamente moderna y feminista y quiso que sus hijas estudiaran para que tuvieran independencia económica e intelectual. Su paso por la cárcel le hizo ver que cuando lo pierdes todo, solo te queda lo que sabes y para lo que puedes ser útil.
Granada le marcó en muchos aspectos y siempre la recordó con nostalgia. La excelente escuela de Botánica y de Farmacognosia (el arte de extraer de las plantas sus activos) de la facultad, junto con la riqueza vegetal que va desde la flora alpina a la subtropical de la costa, la hizo decidirse por ese tipo de estudios.
Al acabar la carrera, estableció su farmacia en un barrio popular de Valencia, donde percibió que las personas tenían numerosos problemas y alteraciones en la piel, al tratarse de campesinos o trabajadores de los astilleros. Partiendo de la enorme riqueza vegetal de la Huerta Valenciana, diseñó una serie de productos eficaces y baratos para el cuidado de la piel, que fueron, allá en los años cincuenta, un gran éxito.
Un cambio de paradigma
¿De dónde surgió la filosofía de Paquita Ors sobre la importancia de ofrecer soluciones cosméticas personalizadas?
Cuando trabajas en una farmacia, te das cuenta de que cada persona es un mundo y que, además, si cambia la circunstancia de la persona y su entorno, cambia también muchas veces su salud, su estado de ánimo y muchos factores. Por eso, los medicamentos se prescriben de manera personalizada, y médicos, farmacéuticos y ATS valoran a quién y en qué momento se aplican.
Decidimos llevar este sistema al campo del cuidado de la piel. Había que ver la piel de la persona, conocer cosas de su existencia y valorar si las circunstancias cambian qué tratamiento aplicar. Muchas veces, las grandes firmas, al no estar seguras de a quién y en qué momento se recomendaban los cosméticos, preferían que estos fueran menos potentes, pero más manejables. Mi madre le dio la vuelta a este paradigma.
La belleza es una necesidad, y todo el mundo tiene derecho a ella. Los productos tienen que ser baratos y eficaces, prescindiendo de lo superfluo y concentrándose en su acción.
Su ingrediente estrella
¿Tenía algún ingrediente favorito o por el que tuviera especial inclinación?
Siempre nos hemos inclinado por las plantas de la cuenca mediterránea, que es riquísima en vegetales muy activos. Uno de los favoritos de mi madre era la raíz de regaliz, de la que cada vez se descubren más propiedades. Es un buen cicatrizante, es calmante, regula las hormonas en la piel y sube las defensas. Bajo su aparente modestia, se esconde un aliado lleno de armas para el cuidado de la piel y el cabello.
Las pieles con tendencia al acné, los procesos de cicatrización o el cabello sobreengrasado y que se cae encuentran en los extractos de regaliz una solución eficaz, rápida y económica.
No hay ética sin estética
¿Cuáles fueron los principales desafíos que enfrentó Paquita al crear su propia línea de cosméticos?
Hubo que vencer una fuerte oposición porque la gente veía la cosmética como algo de lujo, que en realidad no servía para nada y donde lo que contaba era el embalaje y una publicidad llena de jovencitas que, en realidad, no necesitaban ningún tratamiento. El uso de plantas y extractos vegetales despertaba también una gran desconfianza.
¿Podrías compartir alguna historia o recuerdo personal que muestre su carácter, pasión o sentido del humor?
Era básicamente una gran perfeccionista, con una enorme capacidad de trabajo y una gran vocación de servicio. Le gustaban las personas y se sentía bien ayudándolas. Luchaba por convencer a las mujeres para que fueran dueñas de su cuerpo y para que, pasados los cincuenta, no se volvieran invisibles ni renunciaran a la vida y al erotismo.
A una persona le tiene que apetecer gustar a los demás, sentirse atractiva a cualquier edad y ver que su físico está bien. El lema: «No hay ética sin estética» es muy importante.
Un futuro que honra su legado
¿Qué planes tiene la familia Ors para continuar con la visión y el legado de Paquita?
Personalmente, y a pesar de mis años, no pienso en jubilarme. Soy un gran enamorado de mi trabajo, como lo era mi madre, que trabajó hasta los 89 años. Una empresa familiar es como una historia de amor, y al igual que cuando estás enamorado quieres ver al ser amado, hacer planes y disfrutar con ella. Nuestra empresa sigue para mí llena de planes, de posibilidades que explorar y de un enorme potencial.
Mis dos hijos, mellizos, están acabando sus carreras de Farmacia y Química, y confío en que en un par de años se incorporen, aportando frescura, entusiasmo y nuevas ideas. Nuestras líneas de investigación están en pleno desarrollo, y estamos sacando nuevos productos para combatir el estrés en la piel, el envejecimiento solar, distintos tipos de caída del cabello y aspectos como la psicocosmética o la cosmética de apoyo al paciente oncológico.
Paquita Ors fue una mujer adelantada a su tiempo, fascinante y con una curiosidad y entusiasmo innatos. Desde VIBE queremos rendir homenaje a su vida y a su legado, un legado que su familia, con Jerónimo Ors a la cabeza, sigue honrando con trabajo, esfuerzo, vocación y mucho amor. Larga vida a la cosmética botánica de Cosméticos Paquita Ors.
