Seguro que ya has escuchado hablar de los parches faciales. La cosmética se diversifica en diferentes productos, texturas y formatos. Entre todo lo que podemos encontrar al alcance de la mano tenemos los parches faciales. Conocidos fundamentalmente por ser de dos tipos: los indicados para el contorno de ojos y aquellos que tienen microagujas para rellenar las arrugas atenuándolas visiblemente.
Los primeros suelen ser de hidrogel o sustancias gelatinosas y están enfocados a retener la humedad y agua de la piel además de aportar ácido hialurónico, entre otros ingredientes. Se usan normalmente a una temperatura fría para que, además de hidratar la zona, desinflame y baje la hinchazón. Por eso dicen que lo mejor es ponerlos en la nevera.
Los segundos tienen unas microagujas cortas que se encargan de penetrar en la piel a un nivel más profundo. Estas miniagujas contienen una fórmula que incide profundamente siendo la antesala a la medicina estética (su nivel de penetración es menos profundo) pero tampoco se quedan en la superficie en la que puede actuar una crema.
Nuestra selección de parches faciales
Lo que tienen en común todos estos tipos de parches de efecto mascarilla es que los resultados son visibles desde la primera aplicación, no se interpretan como un tratamiento continuado y tiran bastante del amado ‘efecto flash’. El objetivo es hacer mucho en poco tiempo sin necesidad de recurrir a técnicas que impliquen la medicina estética o incluso la cirugía. Evidentemente, los resultados son más sutiles y transitorios, pero sí que actúan rápidamente.
Hemos probado varios tipos de parches faciales de varias marcas y podemos decirte que estos tres sí que funcionan.
Eye Therapy Patch de Talika
Un absoluto clásico, cada par de puede usar hasta tres veces sin perder efectividad. Se consagraron como los primeros parches reutilizables con efecto alisado inmediato que eliminan en una puesta los signos de fatiga, suavizan, tensan y rellenan el contorno de ojos en solo 15 minutos. Su tecnología exclusiva a base de aceites vegetales en gel penetra en la piel junto a un cóctel de ceramidas, manteca de karité, aceite de rosa mosqueta, germen de trigo y aguacate. Estos parches faciales se adaptan perfectamente al contorno de los ojos para alisar visiblemente las arrugas y descongestionar la zona al instante.
Parches faciales de Factor Skin 53
Están formados por ácido hialurónico y EGF, un componente formado por dos moléculas de proteína fijadora y dos moléculas del citado factor, cuyas cadenas peptídicas disponen de hasta 53 aminoácidos. Ambos principios activos mejoran la textura y el tono del contorno de ojos.
Anteriormente, el método de micromoldeo convencional a menudo creaba una microestructura imperfecta debido a la viscosidad de las materias. La tecnología en la que se basan estos parches faciales es la DAB: un método internacionalmente reconocido que utiliza una cantidad deseada de polímero para formar una microestructura perfecta, del tamaño de un cuarto de un cabello, en forma de gota puntiaguda sin pérdida o deformación de los principios activos. Estos parches son completamente indoloros, fáciles de aplicar y no dejan marcas. Para que no les temas. Tienes que ponerlos en el contorno de ojos antes de acostarte y retirarlos a la mañana siguiente.
Inhibit High Definition Patches de Natura Bissé
Es un pack que está enfocado a difuminar arrugas. Además de tener ácido hialurónico, también cuentan con conotoxina, una sustancia que ayuda a relajar de forma eficaz las contracciones faciales, la principal causa de las líneas de expresión, de modo que suaviza las arrugas y ayuda a prevenir su aparición de manera significativa. Estos parches faciales hay que probarlos al menos una vez en la vida, aunque sean casi de lujo. Y, sobre todo: funcionan.
